Han pasado seis meses de la muerte del Dictador y crece el rechazo y el desprecio a lo que queda de él en los cubanos. En su viaje al infierno va recogiendo lo que sembró: odio, rechazo, desprecio, miseria, pobreza, y dolor en las familias.
Merecido lo tiene el difunto.
Los militares y obedientes funcionarios con sus acciones represivas se han encargado de acelarar el proceso de desprecio en los cubanos.
Mientras ya algunos conocidos entraron al régimen carcelario a cumplir sanciones por “difamar a los mártires de la Patria (entiéndase el Dictador) que les fueron impuestas a raíz de la jornada del luto nacional por la muerte del dictador, otros lo harán en las próximos días.
Raúl Sanchez Valerino cuenta que fue acusado de desacato por gritar Abajo Fidel, Abajo la Dictadura. Sobre él pesa una petición fiscal de 3 años de cárcel por ejercer el derecho a expresarse libremente.
El matrimonio de jóvenes opositores de Pinar del Río Rolando Casares Soto y su esposa Yamilka Abascal Sánchez comienzan por estos días a cumplir una sentencia de cinco y dos años de privación de libertad por el supuesto delito de “atentado» y «desacato» a la figura del difunto que incluso cometieron mucho antes del fallecimiento del Dictador.
En julio de 2016 el matrimonio de Abascal y Casares gritaron consignas anticastristas en rechazo a la detención injusta del joven.
Ambos fueron juzgados y condenados tres meses después de que a Fidel Castro lo introdujeron en el “seboruco funerario” (así califica el colega Pablo Alfonso el lugar donde terminaron las cenizas del viejo).
En enero de este año tres jóvenes holguineros las gemelas Anairis y Adairis Miranda Leyva y el hermano Fidel Batista fueron juzgados y sancionadas bajo acusaciones de «difamar a los mártires de la patria (la sanción se refiere a Fidel Castro)» y «desorden público» durante el duelo decretado en la isla por los funerales del exgobernante cubano Fidel Castro.
También en enero el holguinero Darío Pérez fue condenado a un año de cárcel por “difamar los mártires de la Patria”, delito comprendido en al Artículo 204 del Código Penal.
Carlos Alberto González Rodríguez, de Camajuaní en Villa Clara pintó carteles de ¡Abajo Fidel! el día 26 de noviembre en la localidad de Camajuaní, Villa Clara y recibió dos años de prisión en un juicio sumario el 4 de diciembre (el mismo día que sepultaron al Dictador). Ya cumple su condena en la prisión La Pendiente”.
Otro cubano que permanece tras las rejas desde el 30 de noviembre pasado es el Dr. Eduardo Cardet, coordinador nacional del Movimiento Cristiano Liberación (MCL, fue arrestado de manera violenta en la localidad de Velasco, provincia Holguín.
A Cardet lo acusaron de “atentado a la autoridad”, luego de negarse a acatar las órdenes de la policía política de mantenerse dentro de su vivienda mientras el país era reducido a la obediencia por los funerales del dictador Fidel Castro.
Cardet está hoy en la Prisión Provincial, y esta semana el tribunal provincial ratificó la sentencia de prisión que le impusieron y que deberá cumplir en una cárcel de la provincia (si los que mandan en la isla no deciden lo contrario).