Armando de Armas y Emilio Ichikawa dos cubanos ilustres dejaron este plano en Octubre -cuando el otoño impera en las regiones al norte de los sueños …
Eran amigos y sostenían constante comunicación. Emilio se fue en octubre de 2021 luego lo hizo Armando en octubre de 2024. Las tertulias y disquisiciones literarias y filosóficas las celebran ahora en otro plano.
Por esta fecha se convoca para el homenaje «Armando de Armas in memoriam», organizado por Ego de Kaska Foundation, se llevará a cabo el sábado 11 de octubre a las 2:00 p.m. en el Hotel Chateaubleau, ubicado en 1111 Ponce de León, Coral Gables.
El evento contará con la moderación de Denis Fortún y se presentarán dos de sus novelas inéditas: «Amar así en los días del Coronavirus», con las palabras de Alejandro Ríos, y «Érase una vez el invierno».
Ambas obras, publicadas póstumamente, confirman la vigencia de su palabra y la hondura de su mirada crítica y poética.
Armando de Armas (Santa Clara, Cuba, 15 de octubre de 1958-Miami, 8 de octubre de 2024).En el último post en Facebook -donde solía interactuar constantemente con sus amigos- dejó una imagen del momento en que el Partido Republicano de Cuba reconocían su labor por la libertad de su país del que escapó en 1994 con un grupo de amigos en un barco para dirigirse a Estados Unidos donde recibió asilo político.
El 2 de septiembre de 1995 un año después de haber llegado a EEUUsobrevivió al naufragio en el estrecho de la Florida del barco “Sundown II”, que formaba parte de la Flotilla Democracia, compuesta de exiliados cubanos que se dirigieron a La Habana en protesta contra el régimen de Fidel Castro.
El 31 de agosto de 2007, formó parte de una delegación de líderes del exilio cubano y de legisladores del Congreso de Estados Unidos que, invitados por el Gobierno de Polonia, firmaron junto al presidente polaco Lech Kaczyński el Acuerdo por la Democracia en Cuba en la ciudad de Lubin.

Hombre grande, amigo de los amigos y por sobre todo un escritor de talla universal dejó una amplia obra publicada donde se destacan ensayos y novelas dejó este plano al atardecer del 8 de octubre lejos de Miami donde vivió, amó y soñó los últimos 30 años de su vida.
El hombre de letras y de armas sostenía la idea no menospreciar la opción de la fuerza bruta como camino y remedio para eliminar a los criminales en el poder ya sabía que sus pasos sobre la tierra tenían cuenta regresiva y el 23 de septiembre de 2024 reposteó una foto del año anterior cuando sus amigos y hermanos en las acciones e ideas por la libertad de Cuba le dieron un reconocimiento «por su obra literaria y por su compromiso por los derechos de los individuos frente a cualquier estado totalitario y al mantenimiento de la memoria histórica de los que es el horror del comunismo de manera que no se repita».

Diario de Cuba: Emilio Ichikawa no sostuve comunicación con él. Debo decir que lo mejor que conocí de él como intelectual, ensayista, y ser humano me llegó a través de Armandito con el que sistenían reuniones de amigos, conversaciones de temas diversos.
Incluso destaco una opinion del ilustre academico porque en ella hay tantaas coincidencias en la vida y la obra de ambos intelectuales cubanos -«su figura encarnó la soledad extrema de una inteligencia que no pactaba con las piedades de una comunidad incapaz de acoger en su interior los disensos y las estrías de la razón».
De Ichikawa diario de cuba escribió –Graduado en 1985 de Filosofía por la Universidad de La Habana y exiliado desde el año 2000 en Estados Unidos, Ichikawa tuvo una constante participación en los debates sobre la realidad política y el exilio cubanos a través de su blog personal y medios del sur de la Florida. En El Nuevo Herald mantuvo por varios años una columna semanal.
Ichikawa, de padre japonés y madre cubana, se desempeñó hasta 1996 como docente en la Facultad de Filosofía e Historia de la Universidad de La Habana. Colaboró con la revista Encuentro de la Cultura Cubana y con el Centro Cultural Español, y fungió como especialista en la Biblioteca Nacional de Cuba.
Entre sus títulos figuran El pensamiento agónico (1986), La escritura y el límite (1998), y una recopilación titulada Estudios de Filosofía. Una saga de la cultura cubana (1999), que realizó junto al también fallecido Fernando Martínez Heredia (1939-2017), figura central del grupo que animó la revista teórica cubana Pensamiento Crítico (1967-1971), recordó Rialta.
También publicó los ensayos de La heroicidad revolucionaria (2001), Contra el sacrificio: del camarada al buen vecino (2002) y Antes del veredicto. La demasiada humanidad del Padre Varela (2020).
Gerardo Muñoz Nueva York 14 Oct 2021 escribió Ichikawa fue profesor en la Facultad de Filosofía de La Universidad de la Habana, pero su escritura lo define como un filósofo salvaje, extraño a cualquier autoridad disciplinaria propia de los claustros universitarios. En este sentido, fue quizás el único pensador cubano digno de portar ese rótulo: un auténtico pensador. Y en tanto tal, permaneció hasta el final como un olvidado. Como toda inteligencia verdadera, rechazó la fama y desistió a postularse a los roles divulgados por la maquinaria social (por eso admiraba el apotegma de Vargas Vila: «La sociedad no es más que la producción de excremento»).
En efecto, en los últimos años se retiró del manicomio de la geopolítica cubana en su casa de campo en Homestead. Así, su figura encarnó la soledad extrema de una inteligencia que no pactaba con las piedades de una comunidad incapaz de acoger en su interior los disensos y las estrías de la razón.
En Facebook también amigos y contertulios le recordaron
Se instaló en Miami a finales de los noventa, donde vivió lustros dispares. En algún momento nos dividieron minucias cubanas que ni siquiera recuerdo ahora. Fui testigo de la compleja negociación que mantuvo con sus demonios a lo largo de los años: de sus cuitas con el exilio, sobre todo el suyo, pero también el de todos. Siempre fue generoso, abundante, a la hora de pensar. No sé qué más se le puede pedir a un filósofo. Su muerte repentina y extemporánea me parece una injusticia mayúscula. Emilio fue víctima de otras injusticias, pero esta es de una crueldad sin nombre. Descansa en paz, querido amigo.