Para impulsar la producción arrocera en el país, el Gobierno cubano ha emprendido un Programa de Desarrollo que prevé lograr para el 2016 la siembra de 253 mil hectáreas y alcanzar una producción de 538 mil toneladas de arroz de consumo. Así lo publicó el sitio digital cubadebate.cu

Pero para los bolsillos y las mesas de los cubanos que tienen que alimentarse cada día esa nota del periódico no tiene ningún sentido.

Todos en la isla saben que esas promesas se hacen cada año no sólo con el arroz.

La ineficiencia y el descontrol no se arregla ni con las modernas máquinas y equipos para el fomento de la producción de semillas de arroz, ni com las trilladoras, tractores de fangeo, segadoras, trasplantadoras, motos y equipos de computación, entre otros, que componían la carga donada por Japón en julio del pasado año para «levantar la producción de arroz en el país», como dijo el gobierno.

En julio del año pasado Japón entregó a Cuba un grupo de modernas máquinas y equipos para el fomento de la producción de semillas de arroz. La acción del país asiático parecía indicar que como el ciclo de cosecha del cereal es anual ya para esta fecha el asunto quedaría resuelto, puesto que en la isla el desarrollo de la producción de arroz posee una elevada prioridad, porque forma parte fundamental de la dieta de la población.

Los cubanos están obligadosa hacer malabares para poder poner en la mesa el arroz cuyo consumo promedio en el país es de más de 70 kg por persona al año, uno de los más altos del mundo.

Y el gobierno sigue dependiendo de las buenas voluntades como la del gobierno de Evo Morales que el pasado mes de junio aprobó el envío de una donación de 1.500 toneladas de arroz a la República de Cuba como parte de su política de reciprocidad y solidaridad con un país que fue afectado por los fenómenos naturales. O el «hermano país de Viet Nam que también en junio envió alrededor de 73,000 toneladas en camino a Cuba.

Según datos de USDA (http://oryza.com/) Cuba produce alrededor de 350000 toneladas de arroz al año, pero tiene que importar alrededor de 450000 toneladas de arroz para satisfacer la demanda interna de alrededor de 800000 toneladas.